“…Para algunas autoras y autores la equidad de género, en su caracterización, además de su relación con todo tipo de desigualdades y diferencias, incorpora las diferencias de clase, etnia, generación, sexualidad, región y ubicación en el orden mundial (Cordero, 2017;Duarte y García-Horta, 2016;Raby, 2018;Soler et al, 2018). Para otros, está más relacionada con la obtención de la justicia social, producto de las diferencias (Armijo, 2018;Lagarde, 1997;Soler et al, 2018), para otros implica la transformación de las prácticas injustas y excluyentes (Meza, 2017); otras más señalan que las políticas que demanda la universalidad de la igualdad no son suficientes para generar transformaciones, por ello la necesidad de las políticas de equidad de género (Soler et al, 2018;Vargas, 2011;Winfield et al, 2017). Para Lagarde (1997) y Morales (2018), la equidad de género se relacionada con el acceso a una plena ciudadanía de las mujeres y al ejercicio pleno de sus derechos, para que éste sea desde su especificidad, intereses, discurso, posicionamiento.…”