El presente trabajo quiere resaltar la importancia del liderazgo educativo, como el camino por el que se debe de avanzar para conseguir esa escuela pública de calidad, tal como demanda la sociedad actualmente. Pero también, se pretende dejar claro en este trabajo que, la responsabilidad de esa calidad educativa que se demanda, dependerá en gran medida del propio centro, el cual, debe de estar cargado de cierta cota de autonomía que le permita poder desarrollar sus propios proyectos, adecuándolos a sus contextos, con el fin también, de pedir responsabilidades al liderazgo directivo de los resultados obtenidos.