Se da el nombre de tolerancia oral al estado de respuesta inmune sistémica disminuida a antígenos administrados por la vía oral. Si bien el fenómeno fue descrito anecdóticamente desde hace muchos años, sus mecanismos y posibles aplicaciones todavía son materia de especulación. Entre sus características notables se destacan la especificidad y la timodependencia. La tolerancia se manifiesta por ausencia de anticuerpos sistémicos, de hipersensibilidad de tipo retardado y de respuestas proliferativas al antígeno específico. Los posibles mecanismos responsables de la tolerancia oral se han agrupado en tres tipos: inmunológicos, gastrointestinales e individuales. En cuanto a los inmunológicos, el más importante podría ser la existencia de las células contrasupresoras, pero los mecanismos íntimos de funcionamiento de éstas no están completamente elaborados. El estudio del fenómeno de la tolerancia oral abre un amplio campo de investigación con implicaciones sobre la inmunoprofilaxis y la inmunoterapia de diferentes entidades nosológicas.