“…Aunque existen muchos documentos de consenso y guías de manejo de las queratosis actínicas basados en reuniones de expertos, el grado de recomendació n de estas guías es bajo por definició n, y deben tomarse má s como documentos de formació n e informació n. Lo que está claro es que no existe un algoritmo consensuado y definitivo respecto al tratamiento de las queratosis actínicas, y ante la ausencia de ensayos clínicos comparativos entre sí de la mayoría de tratamientos disponibles 14 la elecció n debe basarse en la eficacia a corto plazo, y sobre todo a largo plazo, evidenciada en los ensayos clínicos aleatorizados y controlados con placebo usados para su aprobació n. Así pues, ademá s de la eficacia, efectos adversos, resultados esté ticos y mecanismo de acció n de un determinado tratamiento, su elecció n debe basarse en el tipo de queratosis actínicas, su nú mero, su extensió n, su localizació n, las características del paciente, su estado de salud, los antecedentes de transformació n a carcinoma epidermoide de queratosis actínicas previas y su capacidad para tener una buena adherencia, ademá s de la disponibilidad de un determinado tipo de tratamiento y el coste asociado al mismo [15][16][17][18][19][20] , sin olvidar en ningú n momento la experiencia y preferencias del dermató logo y del paciente previamente informado.…”