“…Pensemos, por ejemplo en el caso de Argentina y sus acontecimientos recientes: en el gobierno de los Kirchner fue una constante el reclamo de la soberanía frente a organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (fmi), ante el que, en nombre del Estado, desconocieron la deuda externa y reclamaron menos injerencia en asuntos internos y militares por parte de los Estados Unidos y de las potencias mundiales del G7, pero a su vez avanzaron en la consolidación de las relaciones con China, Estado al que, incluso, le permitieron establecer una base de avanzada que está al mando de militares del país asiático, además, fortalecieron su relación con países que seguían una línea de pensamiento político similar al suyo, como Venezuela, Bolivia, Ecuador y Brasil. Con la llegada del gobierno de Mauricio Macri en 2015, el conflicto interno de división y de propuestas diferentes de Estado se contraponen y se vuelven a externalizar posturas diferente, lo que abre camino para sus estrategias frente a grupos como el G20 y el mismo fmi (Saín, 2018).…”