En el año 2022 se otorgó el premio Nobel de química a Carolyn R. Bertozzi, Morten Meldal y K. Barry Sharpless por sus aportaciones en el desarrollo de la química clic y la química bioortogonal. La trascendencia de este tipo de reacciones radica en que, por su sencillez, selectividad, eficiencia y tolerancia a diferentes medios, incluido el acuoso, ha impactado no sólo en la química sintética de moléculas complejas y materiales, sino también en el área farmacéutica, ya que, aplicando este tipo de reacciones es posible formar conjugados con biomoléculas como proteínas, abriendo la puerta a la exploración y comprensión de diversos procesos biológicos en los organismos vivos para acceder así a terapias dirigidas más eficientes. En el Instituto de Investigaciones en Materiales de la UNAM hemos aplicado esta reacción de manera exitosa para modificar directamente algunas moléculas bioactivas como la curcumina (antioxidante natural), mejorando sus propiedades fisicoquímicas como solubilidad y estabilidad química. Asimismo, aplicando reacciones clic se sintetizaron derivados de β-ciclodextrina como nuevos acarreadores de fármacos, incorporando sustituyentes altamente ramificados llamados dendrones que confieren un adecuado balance hidrofílico/hidrofóbico. Estas modificaciones nos permitieron optimizar su paso a través de las membranas celulares por difusión, y su capacidad para encapsular fármacos hidrofóbicos.