“…Estos avances ponen al descubierto que la condición de discapacidad en la historia se ha entendido como padecimiento, sufrimiento y angustia, a partir de la perspectiva del modelo médicorehabilitador. En el caso de Colombia, hay un tránsito importante y desde finales de los años ochenta aumentaron las investigaciones respecto al tema (Rojas y Haya, 2017), pero las valoraciones de la discapacidad como una anormalidad que debe ser superada perpetúan las barreras para la participación de estas personas en los diferentes escenarios; además, limitan el autorreconocimiento de cuerpos diversos que merecen los derechos ciudadanos de todos los habitantes del país, puesto que ello influye en la configuración como seres sociales y políticos. La presencia de actitudes de rechazo, limitación en el acceso a la educación y a oportunidades laborales (Santamaría, Angarita, Bayona, Delgado, Parra y Pérez, 2013) afectan la valoración social, el acceso a los derechos y el surgimiento de condiciones de autonomía y formas de vida independiente.…”