“…Estos canales de menores creadores de contenidos están promovidos por los padres, ya que para que un menor pueda abrir una cuenta en YouTube debe tener al menos 13 años y contar con apoyo para la grabación, edición y difusión de los videos (Bergen, 2019;Siwa, 2019). En numerosos canales los padres son protagonistas junto con sus hijos, aparecen en un segundo plano o simplemente son la voz en off que acompaña a todos los videos (Chau, 2010;Craig & Cunningham, 2017;Evans, 2020;Lange, 2014;McRoberts et al, 2016). Los padres son quienes monetizan las ganancias derivadas de estos canales por la publicidad que albergan los formatos propios de YouTube o por la inserción de marcas en los contenidos de los videos (Nieto Moreno & Sosa Troya, 2019).…”