“…En cuanto a los instrumentos de medida utilizados para recopilar la información existen gran diversidad, con escalas de valoración que tienen como propósito verificar la presencia del trastorno y sus síntomas, como ADOS 1 (Doernberg et al, 2021;Gal et al, 2016;Morgan et al, 2018), SRS (Gal et al, 2016;Kylliänen et al, 2020), AQ (Sofronoff et al, 2017), ADI-R (Doernberg et al, 2021;Lopata et al, 2017) y así como la escala SRS-2 (Lopata et al, 2017) o la prueba ASSQ que está orientada a la detección de individuos con TEA con una capacidad intelectual alta (Radley et al, 2017;Radley et al, 2018), junto a la de CARS (Bharati et al, 2019) y CAST (Rodríguez-Medina et al, 2016), orientadas a detectar el Espectro Autista en edades tempranas. En esta línea, se observan pruebas que detectan los síntomas, así como las conductas asociadas al trastorno, como en el estudio de Beaumont et al (2020) en el que mediante la prueba SCA-P se determina la gravedad de la ansiedad social de los participantes con TEA, así como con ECBI la cual especifica la intensidad actual del comportamiento de los niños.…”