AgradecimientosHace ocho años, durante el penúltimo curso académico de mi licenciatura en Química, me dediqué a visitar todos los institutos de investigación de los que tenía conocimiento, con la intención de conseguir realizar prácticas formativas complementarias. Todas las personas con las que me entrevistaba tenían algo en común: ninguna tenía problemas con que realizara prácticas formativas en su instituto... pero a todos les faltaba algo. Fue por casualidad, un día que andaba por la UPV, se me ocurrió echar un vistazo a uno de esos carteles informativos con el plano y la descripción de todas las instalaciones. Fue entonces cuando encontré el nombre del Instituto de Tecnología Química. Ya me había hablado de él un profesor del departamento de química inorgánica, Carlos Gómez (uno de los mejores docentes que he tenido, brillante y humilde, motivado y motivador). En ese preciso momento decidí acudir para informarme. Preguntando, acabé en el despacho de gerencia. Allí estaba Amparo Mifsud, quien amablemente me recibió. De modo que hablamos acerca del ITQ y de mis inquietudes. Gracias a su mediación me dio a conocer a José Manuel López Nieto. Y a partir de ahí empezó todo lo que finalmente ha tenido como resultado la presente memoria de Tesis doctoral. Primero fueron prácticas en verano, que llevaron a más prácticas en invierno, al proyecto final de carrera, a contratos de investigación, y finalmente beca para Tesis doctoral (BES-2004-4765):Financiada por el Ministerio de Educación y Ciencia con cargo al proyecto
PPQ2003-03946Quiero agradecer a Amparo Mifsud su voto de confianza con aquel chaval ingenuo e ilusionado que hace ocho años entro en su despacho por primera vez. Gracias también, porque desde entonces siempre lo ha tenido abierto para lo bueno y para lo malo (como dice ella).Agradecer al Prof. José Manuel López Nieto, la oportunidad que me ha brindado al depositar su confianza en mi para realizar esta tesis. Desde la primera entrevista me contagió todo su entusiasmo por este trabajo, la investigación, y desde entonces no le he visto perder ni un ápice de esa ilusión.Gracias por su tiempo, sus consejos, sus ideas. Gracias por su motivación y por todo el interés que ha puesto en mi formación en el campo de la investigación química.También quiero dar las gracias especialmente al director del Instituto, el Prof. Avelino Corma, siempre disponible con una sonrisa, a pesar de sus innumerables obligaciones, para cualquier cosa que he podido necesitar. Por sus sinceros y sabios consejos, y en especial por su apoyo profesional.Agradecer a todas las personas que con su trabajo han colaborado en la consecución de esta tesis:Benjamín Solsona (mi modesto compañero y amigo), Pablo Botella (maestro en el arte de la síntesis), Patricia Concepción, Enrique Rodríguez, Ana Dejoz, M. Isabel Vázquez, José Luís Jordá. A todo el personal de caracterización: Chusa, Fanny, Rosa, Maribel, Amparo, Alejandro, Adelina.Al personal de administración: Inma, Mónica (mi ángel de la guarda personal), Mª Amparo, Inma, Agustín, etc.Al perso...