La pandemia por Covid-19 ha marcado cambio en paradigma de la atención médica, generando la necesidad del uso de equipo de protección individual (EPI), para salvaguardar la salud. Lo que ha originado manifestaciones cutáneas secundarias asociadas al uso de los mismos. Se realizó una investigación descriptiva de corte transversal con el objetivo de caracterizar las lesiones cutáneas asociadas al uso de EPI e infecciones por Staphylococcusaureus en 283 enfermeros, el diagnóstico dermatológico fue realizado por especialistas; el cultivo bacteriológico se realizó a partir de hisopados de algodón estériles o frotis de aposición sobre la lesión de piel. Para el aislamiento del género Staphylococcus, las muestras se sembraron en agar salino manitol rojo de fenol, incubándose de 24 a 48 horas a 37°C. La identificación de S. aureus se efectúo por la fermentación del manitol en el agar selectivo, la reacción positiva de la prueba de la coagulasa. El S. aureus se diferenció del Staphylococcus coagulasa negativo con el empleo de la prueba de la Dnasa. Se precisó LC-EPI en 75,618% de los enfermeros, de los cuales 92,523% presentaron síntomas sugestivos a infección bacteriana secundaria, ratificada en su totalidad por cultivo microbiológico, identificando a S. aureus. Se estimó que más del 60% de las LC-EPI eran de presentación única catalogada grado I, afectando mayormente las regiones: orbitaria, temporal, nasal, infraorbitaria y frontal, asociándose con el uso de lentes/protectores faciales, gorros y mascarillas como causantes de las lesiones. Se recomienda la definición de protocolos de prevención de LC-EPI.