“…La violencia en el noviazgo se ha convertido en un problema de salud pública de interés mundial por su impacto a nivel físico y psicológico en adolescentes y adultos jóvenes (Morris, Mrug & Windle, 2015;Pichiule, Gandarillas, Díez-Gañán, Sonego, & Ordobás, 2014). Entre las dificultades con las que se ha relacionado se encuentran el bajo rendimiento académico, problemas en las relaciones sociales y escolares, embarazos no deseados, riesgo suicida, abuso de sustancias psicoactivas y alcohol, estrategias de control de peso poco saludables y comportamientos sexuales de riesgo (Belshaw, Siddique, Tanner & Osho, 2012;Horner, et al, 2011;Valenzuela, Ibarra, Zubarew & Correa, 2013;Wincentak, Connolly, & Card, 2016). Estudios realizados en colegios y universidades han reportado prevalencias entre 21% y 80% de jóvenes que informaron haber sido víctima de algún tipo de violencia por parte de su pareja y del 22% al 60% de jóvenes que comunicaron haber utilizado algún tipo de violencia en contra de esta (Arbach, Nguyen & Bobbio, 2015;Gressard, Swahn & Tharp, 2015;Lehrer, Lehrer & Zhao, 2010).…”