Este artículo analiza la producción y el consumo de festejos de cumpleaños infantiles en salones de la ciudad de Córdoba, Argentina; que, como parte del circuito de diversión, ofrecían al público en estos espacios, experimentar una minidisco y fiestas temáticas de princesas. El análisis del montaje de ambas experiencias, mercantilizadas por parte de sus productores y consumidores, se apoyó en un trabajo etnográfico que transcurrió en salones de celebración infantil durante el período 2012-2017, dando como resultado un trabajo de tesis doctoral. Luego de presentar las trayectorias de las y los jóvenes que se ocupaban del divertimento, el escrito avanza en la descripción de las características de ambos tipos de celebración permitiendo trazar puntos de encuentro y diferencias entre los modos de gestionar los estados anímicos. Según se concluye, en dichas fiestas se reproducía la lógica de la oposición binaria entre lo masculino y femenino, asimismo, algunas infancias encontraban intersticios para subvertirla.