32 Nursing2014 | Volumen 31 | Número 4 TRAS HABER EXPERIMENTADO un cuadro de dolor en el cuadrante superior derecho del abdomen que persistió durante varias semanas, el señor G., de 28 años, es ingresado en una unidad de enfermería con un cuadro clínico de fiebre, anorexia, náuseas y vómitos, y diarrea. El paciente comenta a la enfermera que se siente cansado todo el tiempo y que «le duele todo el cuerpo». La enfermera nota que las escleróticas presentan ictericia.En el contexto de la anamnesis, el señor G. dice a la enfermera que él y su amigo se realizaron tatuajes hace aproximadamente 3 meses, en un salón de tatuajes. En función de los datos de la historia clínica y de los signos y síntomas, la enfermera sospecha una hepatitis vírica, que puede requerir una asistencia y una intervención terapéutica inmediatas.En este artículo vamos a ver las cinco causas víricas de la hepatitis, que se identifican con las letras A a E. Se diferencian por su modo de transmisión, sus características clínicas iniciales y su período de incubación. A pesar de que hay algunos datos que sugieren la existencia de otras cepas de virus causantes de hepatitis, quedan fuera del objetivo de este artículo. En el cuadro Características anatómicas del hígado y el sistema biliar se muestran las características anatómicas más prominentes de estas estructuras.
Desde un cuadro leve y autolimitado hasta un problema mortalLa hepatitis es un problema de inflamación de las células hepáticas (los hepatocitos) y, en función de su causa, puede ser una enfermedad leve y autolimitada o bien una enfermedad crónica con manifestaciones graves que puede incluso causar el fallecimiento del paciente. A pesar de que la causa más frecuente de la hepatitis es la infección por virus, también puede ser debida a hepatotoxinas, como los tóxicos industriales, y al consumo de alcohol, medicamentos o ciertos remedios de herbolario y productos químicos. (Las causas no víricas de la hepatitis quedan fuera del objetivo de este artículo.) La hepatitis también puede ser secundaria a otras infecciones víricas como las correspondientes al virus de Epstein-Barr, el virus del herpes simple, el virus de la varicela-zóster y el citomegalovirus 1-3 .Los virus de las hepatitis A y E (VHA y VHE, respectivamente) son transmitidos por vía oral-fecal. Por su parte, los virus de las hepatitis B, C y D (VHB, VHC y VHD, respectivamente) se transmiten a través de la sangre y los líquidos corporales.Tras la exposición al patógeno causal, el hígado aumenta de volumen debido a su infiltración por células inflamatorias y linfocitos, y debido también a la presencia de líquido, lo que da lugar a dolor en el cuadrante superior derecho del abdomen. La inflamación induce cambios celulares y necrosis. El tejido hepático inflamado y distorsionado es causa de un aumento de la presión portal y de congestión vascular, lo que dificulta aún más la perfusión del tejido hepático 2,3 . En el cuadro Signos y síntomas de la alteración de la función hepática hay información adicional acerca de la forma con la que...