A principios de los años los setenta, Chile era un reconocido centro de desarrollo de las ciencias sociales y las humanidades en Latinoamérica, que resultaba atractivo por la llamada “vía chilena” al socialismo que encabezó Allende y la Unidad Popular. Los años del ascenso de la sociología chilena se detuvieron repentinamente con el golpe de Estado el 11 de septiembre de 1973. Durante la dictadura, los sociólogos no solo se vieron privados de la oportunidad de encontrar trabajo; la sociología fue estigmatizada como “terrorista” y pasó de ser una disciplina muy respetada e involucrada en políticas públicas y en la conceptualización del progreso social, desde la década de los sesenta, a una disciplina despreciada, cuyo trabajo y miembros fueron perseguidos. A partir del análisis cualitativo de 18 entrevistas con sociólogas y sociólogos que vivieron la época, se identifican tres periodos clave en el desarrollo epistemológico de la sociología chilena: 1) los años antes del golpe; 2) la borradura epistemológica en los primeros años de la dictadura, y 3) la instalación de una sociología tecnócrata en los ochenta. El artículo cierra con una discusión acerca de las posibles lecturas que se pueden hacer de estos giros epistemológicos.