La apendicitis aguda es una patología que con frecuencia es asociada a dolor abdominal, misma que se origina como consecuencia de la inflamación del apéndice, posterior a una obstrucción o taponamiento de la luz apendicular. Se presenta usualmente en pacientes jóvenes (11-20 años), sin embargo, ninguna edad es inmune a esta patología, se estima una incidencia de 100 a 151 por 100.000 personas en América del Norte, Europa del Este y Europa Occidental y una tasa de mortalidad alrededor de 0,25%, siendo el sexo femenino el más frecuente. Esta patología suele caracterizarse por dolor visceral, periumbilical, epigástrico, y a nivel de fosa iliaca derecha; así como signos de irritación peritoneal y obstrucción del flujo vascular. El diagnóstico y manejo de la apendicitis aguda continúa siendo un desafío para los cirujanos, puesto que, existe controversia en tornoa los medios de diagnóstico que se manejan en base a escalas diagnosticas como la de Alvarado o RIPASA, la experiencia de los tratantes en la clínica de la patología, exámenes paraclínicos, o exámenes de imagen operador dependiente; así como el tratamiento más idóneo, ya sea este enfocado en agentes antibacterianos o en el abordaje quirúrgico correspondiente a la apendicectomía. Por ello, el diagnóstico diferencial de un apéndice anormal incluye otras condiciones que a menudo se presentan con signos y síntomas que coinciden con la clínica de apendicitis aguda. En este capítulo, repasamos la patogenia, las manifestaciones clínicas, así como el diagnóstico y manejo característicos de una apendicitis aguda.