“…Por ello resulta intrigante indagar con mayor profundidad las preferencias del voto en un país donde la mayoría del electorado asiste a las urnas durante las elecciones nacionales. 1 Las investigaciones empíricas en ciencia política han acumulado una serie de variables en torno a la decisión del voto, las cuales comprenden tanto de factores de largo como de corto plazo (Miller y Niemi, 2002), incluyendo las características sociodemográficas (Lazarsfeld et al, 1948;Lipset, 1987), la identificación partidaria (Campbell et al, 1960), la proximidad ideológica (Downs, 1957), la evaluación gubernamental (Fiorina, 1981) y económica (Lewis-Beck y Stegmaier, 2007, Lewis-Beck y Stegmaier, 2013), los temas (issues) de valencia y posición (Stokes, 1963) y los efectos de líderes y campañas (Bartels, 2002;Dilliplane, 2014;Iyngar y Simon, 2000;Lawson et al, 2010). Varios trabajos han asumido enfoques multifactoriales en los cuales las distintas variables se disputan por proveer el máximo potencial explicativo, por ejemplo en elecciones de Estados Unidos (Clarke, et al 2015), Italia (Bellucci y Segatti, 2010), Reino Unido (Clarke et al, 2004) y América Latina (Carlin, Singer, y Zechmeister, 2015;Nadeau et al, 2017).…”