“…[17][18][19] . Al infectar la mucosa gástrica se produce un aumento local en la síntesis y secreción de citoquinas proinflamatorias como las IL (Interleucinas) 1B, 6, 8, 12, 18 y 23, INF-ƴ (Interferón-ƴ) y TNF-α (Factor de Necrosis Tumoral-α) por parte de varias células, como las células dendríticas, células T, monocitos y neutrófilos, entre otras, en respuesta a moléculas y sustancias secretadas por la bacteria y a la interacción directa con ella [20][21][22][23][24][25] .…”