“…En general, las personas con desarrollo neurotípico aprenden y entienden el mundo a través de los sentidos (Demirovic et al, 2018), pues es a través de los procesos sensoriales como transformamos la información proveída por las sensaciones de nuestro cuerpo y del ambiente en mensajes con significado que nos impulsan a actuar. Erazo (2018) remarca que las personas cuya integración sensorial presenta dificultades o es desorganizada, tienen interrupciones en el procesamiento neurológico y de la información, hecho que interfiere en la habituación y sensibilización, por lo que se dice que padecen el trastorno de integración sensorial, que, según Roselló-Miranda, Berenguer-Forner y Miranda-Casas (2018), se traduce en consecuencias cognitivas, de aprendizaje, en la afectividad y conductuales, que interfieren, no solo en las relaciones personales, sino en la actividad diaria y participativa de la escuela, hecho que dificulta los procesos de inclusión.…”