El presente artículo presenta primeramente una aclaración de los términos más utilizados sobre la temática del feminicidio y una breve referencia histórica al trato que culturalmente se le ha dado a la mujer. Se considera, luego, a la violencia contra la mujer como una manifestación de las relaciones de poder históricamente desiguales entre mujeres y hombres. Se considera que la violencia contra la mujer está constituida como un círculo formado por la violencia directa (física), la violencia estructural (en las estructuras sociales sobre todo mediante las leyes y las costumbres) y la violencia cultural. Se hace referencia al hecho actual de los feminicidios y a las formas en que se presenta. Se pasa a mencionar las explicaciones psicológicas y sociológicas de la violencia de género y la ausencia de decisiones políticas comprometidas. Se concluye con la necesidad de reorganizar la mentalidad social para lograr a largo plazo una convivencia social humana, erradicando la impunidad en los casos presentados, haciendo valer los derechos humanos y reconociendo el cambio de paradigma, en los ámbitos político, social y cultural, donde la mujer se construye como un sujeto, capaz de crear, innovar y poner los estándares que se necesiten para el pleno desarrollo de su vida.Palabras clave: feminicidio, violencia, relaciones de poder, mentalidad social.