A través de un análisis discursivo mediante la utilización de propuestas propias de la Investigación-Acción-Participación-Feminista y de la Metodología Comunicativa, se analizará la idea de la neutralidad y la no neutralidad en las universidades públicas catalanas, en general, y en los grados de Educación Social y en su relación con la violencia de género, en particular. Se destaca que la supuesta neutralidad en la educación social es ficticia, ya que diversos factores como las creencias y valores del profesorado, el sistema político, las ideologías, los recursos disponibles, el contexto del país influyen en el contenido curricular, la forma en cómo se imparte, cómo los y las estudiantes lo interpretan y en cómo lo aplican a sus vidas. En este sentido, se propone la necesidad de trabajar para ofrecer una variedad de perspectivas y fomentar el pensamiento crítico en el alumnado. Asimismo, se sugiere la importancia de que las acciones y la consciencia vayan cogidas de la mano para revertir la situación y abordar la necesidad de mejorar la formación para prevenir la violencia de género.