“…En Sudamérica, durante los últimos años, el problema de la ambigüedad antropogénica en contextos tempranos ha sido discutida en sitios con conjuntos líticos escasos y/o poco diagnósticos o bien en aquellos con abundantes especímenes, pero cuyos atributos morfológicos son de difícil lectura debido a las posibilidades de equifinalidad con agentes naturales que pudieron producirlos (Guidon y Arnaud, 1991;Guidon, Pessis, Parenti, Fontugue y Guérin, 1996;Guidon, 2008;Boëda et al, 2014;Fariña et al, 2014a;2014b;Suárez et al, 2014;Prentiss, Walsh, Barnett, Murphy y Kuenstle, 2015;Garvey y Mena, 2016). En la medida que un contexto arqueológico es más antiguo, el escrutinio respecto a la cualidad cultural de sus evidencias se vuelve mucho más incisivo, en tanto se supone que una mayor cantidad y diversidad de agentes pueden haber influido en cómo se nos presentan (Proffitt et al, 2016;Fiedel, 2017).…”