The evolution of pediatric sedation and anesthesia patient safety: An interview with Dr Charles J. “Charlie” Coté

Abstract

The career of Dr Charles J. Coté covered a period of major advances in pediatric anesthesia patient safety. Dr Coté (1946-), Professor Emeritus in Anaesthesia at Harvard Medical School, helped develop pediatric sedation guidelines, conducted influential clinical research, edited a major textbook, and promoted pediatric anesthesia training fellowships in low-and middle-income countries. Based on a series of interviews with Dr Coté, this article reviews the career of this Robert M. Smith Award winner through the lens of improvements in pediatric sedation and anesthesia patient safety.

Sedación oral a nivel pediátrico aplicada en odontología

“…Las pautas para la sedación de pacientes pediátricos aparecieron a principios de la década de 1980, existen muchas guías de sedación asociadas específicamente para su empleo por parte del anestesiólogo, la única directriz que se ha publicado para pacientes pediátricos a nivel dental, es la guía patrocinada por la Academia Estadounidense de Odontología Pediátrica (AAPD) y la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP), que engloba las directrices para la monitorización y el tratamiento de pacientes pediátricos, antes, durante y después de la sedación en procedimientos diagnósticos y terapéuticos [1][2][3][4].…”

“…Los programas de formación avanzada en odontología pediátrica y maxilofacial brindan experiencias con sedantes orales; sin embargo, aún existe una variabilidad bastante amplia en su uso, es así que los agentes sedantes para procedimientos dentales pueden administrarse por varias vías de administración (oral, inhalatoria, submucosa, intramuscular, intravenosa e intranasal), cada una de las cuales incluye beneficios y riesgos. No obstante, las vías oral e inhalatoria siguen reinando sobre otras vías en popularidad a nivel de odontopediatría [2,3].…”

“…El clínico debe recordar la importancia de emplear herramientas de orientación conductual con niveles de sedación leves y moderados, adicionalmente es prudente esperar que la tasa de resultados satisfactorios no sea excepcional utilizando la vía oral de administración. Es decir, no se puede crear dependencia exclusiva de drogas para controlar por el comportamiento de un niño, un odontólogo competente que utiliza un arsenal bien perfeccionado de habilidades comunicativas de orientación conductual, procesos de selección de pacientes astutos y sedación terapéutica adecuada ofrecerá un enfoque integral de atención [2][3][4]. La farmacología de los agentes sedantes, seguida de sus aplicaciones clínicas en el entorno dental, así como sus posibles efectos adversos son la base de esta búsqueda científica orientada con el objetivo de enfrentar con conocimiento cauteloso el proceso de sedar a un niño durante un procedimiento dental.…”