El sitio arqueológico Quillay (Catamarca, Argentina) es considerado como un centro de extracción de metal a gran escala, debido a la presencia de numerosos hornos con funciones metalúrgicas. Este trabajo tiene como objetivo presentar los resultados de excavaciones de las estructuras de combustión identificadas en el sitio. Los nuevos estudios permitieron conocer la morfología completa de un conjunto importante de hornos, los cuales exponen características que se alejan de aquellas propuestas conocidas para las wayras andinas. Desarrollamos aquí una minuciosa descripción de los hornos, presentamos los resultados preliminares de análisis técnicos efectuados sobre escorias y proponemos algunas interpretaciones que permiten pensar en su dinámica de funcionamiento.Palabras claves: Quillay, hornos de fundición, período Tardío/Inka. El valle de Hualfín en Catamarca, Argentina, se erige como un paisaje que ha jugado un rol principal en la historia prehispánica del Noroeste argentino (NOA). Se puede recorrer en su propia línea del tiempo desde las primeras aldeas agroalfareras, pasando por el surgimiento de señoríos complejos como la entidad cultural Aguada y llegar hasta las épocas de conflictos internos del período Tardío (González y Cowgill 1975). Más tarde, los Inkas se asentarían sobre un contexto social dominado por entidades culturales que los arqueólogos denominamos Belén, cuyos sitios de vivienda, defensivos y campos agrícolas se diseminaban por todo el valle (Balesta et al. 2011). Quillay es un caso extraño, no solo dentro de este panorama sino posiblemente en todo el NOA. Se trata de un asentamiento de unos pocos recintos de piedra que no aportarían mucho si no fuera por la impactante acumulación de hornos metalúrgicos en sus alrededores. A la fecha se han registrado 33 unidades de estas estructuras de combustión que se disponen unas veces en conjuntos y otras veces como hornos individuales. Los recintos del sector, que llamaremos por el momento "habitacional", se componen de 12 unidades -ocho recintos y cuatro anexos-desplegados en sentido N-S. Los hornos se ubican en un radio de hasta dos km a la redonda de este sector (Figura 1).En la actualidad, la región está prácticamente deshabitada a excepción de una única familia de campesinos criadores de ganado caprino. Su vivienda se ubica a escasos 100 m del sector habitacional del sitio, siendo muchas de las rocas de la casa de esta familia procedentes de los recintos arqueológicos.El entorno natural se describe como un barrial (acumulaciones sedimentarias eólicas) de clima seco con abundantes plantas xerófilas y árboles como el algarrobo (Prosopis sp.) y el chañar (Geoffroea