Introducción: Las personas con una orientación sexual alternativa a la heterosexual han sufrido y siguen sufriendo discriminación por parte de sectores de la sociedad reacios a la aceptación de la diversidad, lo que en ciertos casos se traduce en agresiones verbales o físicas. La socialización y educación heteronormativa parecen estar detrás, lo que explicaría que las personas mayores (es decir, las que vivieron y se educaron en un momento histórico donde la sociedad era menos tolerante con la diversidad afectivo-sexual) hayan sido victimizadas en mayor medida. Sin embargo, la violencia hacia este colectivo permanece todavía silente y apenas disponemos de estadísticas que ofrezcan una imagen fidedigna de esta realidad. Objetivo: El objetivo de este trabajo es conocer qué porcentaje de personas mayores ha sufrido violencia debido a su orientación sexual. Metodología: 449 españoles de entre 40-70 años (M=47,21; DT=6,75) participaron en este estudio (51,7% hombres; 48,3% mujeres). En cuanto a la orientación, el 90,2% se autodefinía heterosexual, el 3,8% homosexual y el 6% bisexual. Todos ellos cumplimentaron un cuestionario ad hoc sobre orientación sexual y discriminación. En concreto, la discriminación se evaluó a través de dos preguntas: «¿Has sufrido alguna vez alguna agresión verbal debido a tu orientación sexual?» y «¿Has sufrido alguna vez alguna agresión física debido a tu orientación sexual?», ambas dicotómicas(«Sí» / «No»).Resultados: Entre homosexuales, un 85,7% de hombres y un 33,3% de mujeres ha sufrido violenciaverbal debido a su orientación sexual; asimismo, un 21,4% de hombres habría sufrido ademásagresiones físicas, frente al 0% de mujeres homosexuales. En cuanto a las personas bisexuales,un 18,8% de hombres y un 9,1% de mujeres habría recibido violencia verbal, pero ninguno referiríaagresiones físicas. Finalmente, el porcentaje de personas heterosexuales que refiere haber sufridoagresiones verbales por su orientación sexual es de apenas un 3,5% en hombres y un 1,5% enmujeres, y sólo un 1% de mujeres refiere agresiones físicas. Las diferencias en el porcentaje deagresiones físicas y verbales en función de la orientación sexual alcanzan en ambos casos el nivelp<.001.Conclusiones: Estos resultados confirman los importantes niveles de discriminación sufridospor las personas mayores con una orientación sexual alternativa a la heterosexual, sobre todo porlos hombres homosexuales. Así, de igual modo que instituciones y asociaciones desarrollan programaspara prevenir la violencia LGTBI en jóvenes, se debería abordar la victimización entre adultosmayores, lo que minimizaría el impacto psicosocial en este colectivo.