“…Tal como lo señalan estudios recientes, el uso de videojuegos como recurso pedagógico puede permitir que el aprendizaje sea vivencial y entretenido, así como fomentar y desarrollar habilidades cognitivas superiores (Carretero et al, 2008;Gerber y Scott, 2011;Watson, Mong y Harris, 2011;Connollya, Boylea, MacArthur, Haineya y Boyle, 2012;All, Castellar y Van Looy, 2014;Kiili, Devlin, Perttula, Tuomi y Lindstedt, 2015), ayudar a desarrollar la creatividad y aumentar la motivación de los estudiantes (Papastergiou, 2009;Jackson, Witt, Games, Fitzgerald, Von Eye y Zhao, 2011). Además, debido a su calidad gráfica, reglas y mecánicas, pueden cumplir con los requerimientos para promover un aprendizaje lúdico, inmersivo y participativo (Cuenca y Martín, 2010;Watson et al, 2011).…”