“…Ambos componentes son determinantes, por cuanto constituyen los rasgos definitorios de cada unidad de paisaje natural, lo que posibilita la asignación de una denominación a cada una de las unidades. Por consiguiente, con base a ellos se ha confeccionado el mapa, a partir de la intercalación de los mapas de unidades geomorfológicas y vegetales elaborados previamente(Marino et al, 2017a;Marino, 2020) y aplicando un diseño que sigue las últimas propuestas de representación cartográfica del paisaje natural(Rodríguez y Castañón, 2016). Así, los elementos geomorfológicos que articulan las unidades de paisaje natural constituyen la base del mapa, representados en negro mediante símbolos(Joly, 1997); mientras que para la vegetación se utiliza una gama cromática establecida en función de los factores ambientales(Gaussen, 1966), diferenciándose a su vez cuatro categorías en función de la fisonomía (porte y grado de recubrimiento): formaciones arbóreas cerradas (colores planos de tonalidades intensas), formaciones arbóreas abiertas (tramas de líneas de color equidistantes), pies aislados (tramas de líneas de color más separadas), matorrales y formaciones herbáceas (tonalidades de gris) y cultivos (blanco) (Figura 3).11 Desde esta segunda perspectiva cabe reseñar los trabajos acerca del paisaje agrario sayagués desarrolladospor Prada Llorente (2001, 2011.…”