Se ofrece un análisis histórico y urbano sobre los vínculos entre el río Santa Catarina y la ciudad de Monterrey, México, desde su canalización en 1952 y hasta el 2010, subrayando la inadecuada ocupación del cauce como espacio público. Se advierte sobre los inconvenientes de construir directamente sobre el lecho. Se parte de la consulta de fuentes impresas periódicas para aportar información de primera mano sobre políticas públicas y urbanas, lo que posibilita replicar la metodología aquí aplicada. Se refiere la regeneración ambiental del río a partir de 2010, lo que plantea beneficios ecológicos de cara al cambio climático, previniendo sobre los riesgos que supondría su pérdida.