“…En este marco, se otorga importancia el empleo de cartografía, de datos georreferenciados, de modelos estadísticos y de difusión, potencializando el uso de los Sistemas de Información Geográfica y otras Tecnologías de la Información y Comunicación (Barbosa y Hernández García, 2020;Buzai, 2020;García de León Loza, 2020;Martinuci et al, 2020b;Pereira Caldas et al, 2020;Romero et al, 2020;Santana Juárez et al, 2020;Santos Júnior et al, 2020;Sotela y Mayorga, 2020;Vicente Ferreira et al, 2020;Aleixo et al, 2020;Lima e Silva et al, 2020;Magalhães et al, 2020;Vicente Ferreira, 2020). Así, el análisis cuantitativo y cartográfico se ha orientado a identificar las desigualdades socioespaciales y las vulnerabilidades preexistentes (Alarcón y Juárez Gutiérrez, 2020; Cardoso Rodrigues y Cardoso Rodrigues, 2020;Catão et al, 2020;Juárez, 2020;Martinuci et al, 2020a;Neto, 2020;Nossa, 2020;Wagner et al, 2020), a construir indicadores de sustentabilidad, vulnerabilidad y riesgo (Gonzaga et al, 2020;Nascimento Júnior et al, 2020;Salinas y Nochebuena, 2020;Ramalho Barros et al, 2020;Soares Da Silva, et al, 2020) y a analizar la percepción del riesgo del COVID-19 en términos de miedo y aislamiento (Bezerra et al, 2020;Gomes de Aguiar et al, 2020).…”