El estudiante de primer ingreso a la universidad experimenta cambios   en la carga curricular, horarios de estudio extensos y economía, los cuales pueden incidir en la conducta alimentaria (De Piero, et al., 2015) marcada por la pandemia COVID-19 en un ciclo académico no presencial. En el estudio interdisciplinario y transversal se exploraron variables de seguridad alimentaria: disponibilidad, acceso, estado nutricional y calidad de la dieta de 284 estudiantes del Centro Universitario de Jutiapa [JUSAC] en el primer cuatrimestre del 2021. Se identificó el nivel de malestar psicológico y el rendimiento académico con base a resultados de dos evaluaciones parciales. Para la recolección de información se utilizó un cuestionario con preguntas de la ELCSA, el Índice de Masa Corporal y de cada especialidad.   El estudio reveló que en el periodo de referencia sí hubo acceso, físico y económica a alimentos. El índice de alimentación saludable revela que el 89% de estudiantes necesita cambios en la dieta con incidencia en sobrepeso. El coeficiente de correlación entre el malestar psicológico y la calidad de la dieta (-0.072), entre malestar psicológico y estado nutricional (0.096), el malestar psicológico y el sobrepeso como estado nutricional (0.123) estadísticamente no son significativos. El 67% de estudiantes presentó rendimiento académico satisfactorio. Palabras clave: Acceso, calidad de la dieta, estado nutricional, malestar psicológico.

El estudio para determinar el escenario laboral de estudiantes el Centro Universitario de Jutiapa afectados por la pandemia COVID-19 contó con la participación de 558 estudiantes hombres y mujeres de seis carreras impartidas. Con enfoque mixto, nivel exploratorio y descriptivo, a través de una encuesta en línea se logró establecer que del 67% que estuvo en situación de empleo en los meses de marzo a agosto de 2020 experimentaron: reducción de la jornada laboral (119), suspensión temporal de contratos de trabajo (34),  goce de vacaciones anticipadas (08), y despidos (64). Se   determinó que el 50% desarrolló actividades como elaboración de alimentos para llevar, servicio de entrega a domicilio y ventas en línea para generar ingresos. Las actividades económicas más prometedoras para la creación de nuevos empleos están enfocadas en el teletrabajo, tutorías y asesorías en línea. Se identificó la innovación tecnológica y los emprendimientos como la clave para activar la economía. Las actividades en auge para promover el empleo son el comercio electrónico, servicio de cuidado de la salud, teletrabajo y turismo local las que demandan nuevas habilidades, tecnificación y profesionalización para optar a mejores oportunidades laborales.   Palabras Clave: Empleo, desempleo, confinamiento, competencias laborales, oportunidades.