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Mientras los apoyos financieros y logísticos para promover la conservación en comunidades campesinas e indígenas aumentan, la literatura sobre ecoturismo comunitario, que es una de sus estrategias más destacadas, está llena de contradicciones y suposiciones carentes de respaldo empírico. Particularmente, en lo que se refiere al cambio a largo plazo que esta modificación en las actividades productivas representa. Para analizar tales cuestiones se identificaron y evaluaron las profundas trasformaciones sociopolíticas impulsadas por esta actividad en La Ventanilla: un destino mexicano ubicado en la costa del estado de Oaxaca, y que frecuentemente se menciona como un caso ejemplar por su desarrollo social y ambientalmente equilibrado. En este artículo se presenta un estudio detallado de la ecología política a diferentes escalas geográficas y a lo largo del tiempo. Los resultados contrastan con otras versiones más optimistas que carecen de la visión diacrónica. Más bien, se ilustra un “choque de trenes institucional” que, paradójicamente, hace más vulnerable la ecología local: menor cohesión social, reciprocidad, sentido de comunidad y confianza mutua, mientras se detonan procesos como la especulación y la desigualdad. Consecuentemente, la intervención de actores externos, aunque bien intencionada, ha agudizado las desigualdades socioeconómicas y debilitado las instituciones locales.

El objetivo es explicar los aspectos relacionados con el proceso de toma de decisiones por parte de actores involucrados en la adquisición de un biodigestor a escala municipal para tratar residuos orgánicos generados en actividades turísticas de Cozumel, con encuadre en el marco conceptual de la economía circular. El estudio de caso se desarrolló en dos fases. En la primera, mediante la revisión de documentos técnicos, gubernamentales y diarios locales, se conceptualizó la gestión de residuos sólidos en el destino turístico Cozumel. Para la segunda, se realizaron entrevistas a informantes clave y se hizo un análisis de contenido mediado por software. Como principales resultados se obtuvieron modelos explicativos respecto a los obstáculos en la implementación de un biodigestor compatible con la economía circular para Cozumel. Asimismo, se identificaron los principales obstáculos en la implementación del biodigestor, como: la necesidad de fortalecer instrumentos jurídicos y económicos, y la falta de interés y liderazgo ambiental de la red de actores. Del mismo modo, los factores potenciales para la posible adquisición son aspectos técnicos y financieros para la inversión, oferta de proveedores ad hoc y las exigencias del mercado turístico para la competitividad ambiental de la isla.