Se describen los efectos de El Niño Costero 2017 (ENC 2017) en la estructura termohalina, masas de agua y flujos geostróficos dentro de las 100 millas náuticas frente a Paita y Chicama, con base en datos satelitales de vientos e información hidrográfica recolectada en secciones oceanográficas realizadas entre diciembre 2016 y junio 2017. Entre enero y marzo 2017, se registraron anomalías en la velocidad del viento del sur, en el rango de -3,5 a -1,0 m/s, propiciando la estratificación térmica de la capa superior de la columna de agua, así como la intromisión desde el norte de aguas ecuatoriales superficiales (AES) hasta Chicama y de aguas tropicales superficiales (ATS) hasta Paita. En esta última localidad, la temperatura superficial del mar (TSM) registró sus valores máximos de 27,4 °C en febrero en la zona costera (ZC; < 30 mn) y 28,9 °C en marzo en la zona oceánica (ZO; > 30 mn). En Chicama, la TSM alcanzó 25,7 °C en la ZC y 27,9 °C en la ZO, ambas en febrero. Frente a Paita, las anomalías térmicas en superficie alcanzaron sus máximos en febrero (+5,4 °C, ZC; +5,0 °C, ZO), mientras frente a Chicama fue en marzo 2017, los máximos fueron +4,3 °C (ZC) y +4,5 °C (ZO). En cambio, al integrar la capa subsuperficial tanto en la ZC como en la ZO, las máximas anomalías térmicas fueron detectadas en marzo en ambas secciones. En la ZC de Paita, los flujos fueron intensos con dirección al sur en la capa superior de 40 m en enero y en febrero, y en la capa subsuperficial en marzo. En la ZC de Chicama, durante todo el período los flujos fueron débiles, con dirección al norte en la capa superior de 30 m, y al sur en la capa subsuperficial. En la ZO, en ambas secciones los flujos integrados fueron débiles en enero y febrero, en marzo tuvieron dirección al norte. De abril a mayo se presentaron flujos intensos al sur, ocupando la mayor parte de la columna de agua, con valores máximos entre 50 y 150 m de profundidad en ambas secciones, posiblemente asociados al paso de una onda cálida atrapada a la costa, de origen ecuatorial.