The COVID-19 pandemic has led to the adoption of social quarantine measures in numerous countries. 1 In this context, both COVID-19 and quarantine can have a substantial impact in the mental health of affected populations. 2 Health care services have had to adapt themselves to this new reality. Age is the main risk factor for the development of mild cognitive impairment (MCI) and dementia. Older adults are especially vulnerable to severe symptoms of COVID-19 disease, which underlines the importance of optimizing telehealth options for this population. Cur

Los síndromes de falsas identificaciones delirantes consisten en percepciones erróneas de estímulos externos con una creencia o elaboración asociada que se sostiene con una intensidad delirante. Dentro de ellos el signo de la TV consiste en que el paciente imagina que los eventos televisivos observados están ocurriendo en un espacio tridimensional real, es una manifestación poco frecuente en pacientes con demencia. Presentamos una serie de 7 casos clínicos de pacientes con demencia que han manifestado el signo de la TV durante la pandemia COVID-19. La edad promedio fue de 77 años. Dos pacientes tuvieron diagnóstico de demencia tipo Alzheimer, dos de demencia tipo Alzheimer atípico, uno de demencia vascular y tres de causa mixta (2 con demencia tipo Alzheimer + vascular y 1 demencia con cuerpos de Lewy + vascular). Tres presentaron otros síntomas psicóticos y uno se asoció también con la presencia de síndrome de Capgras. Esta serie de casos plantea la posibilidad de un aumento de la incidencia del signo de la TV en pacientes con demencia durante la pandemia precipitado por el aumento de la exposición a dispositivos con pantallas y el aislamiento social durante este período.

In low- and middle-income countries, there is an increase in the percentage of aging population similar to or greater than that of high-income countries (World Population Ageing 1950–2050, UN, 2001). The emerging health and economical challenges due to these demographic changes will have to be addressed by their health systems. In this context, an adequate training of available human resources in geriatric psychiatry/psychogeriatrics (GP/PG) should be an essential step to meet those challenges.