V I I I Co n g r e s o E s t a t a l I s o n o mi a s o b r e i g u a l d a d e n t r e mu j e r e s y h o mb r e sAquest text està subjecte a una llicència Reconeixement-NoComercial-CompartirIgual deCreative Commons, que permet copiar, distribuir i comunicar públicament l'obra sempre que especifique l'autor i el nom de la publicació i sense objectius comercials, i també permet crear obres derivades, sempre que siguen distribuïdes amb aquesta mateixa llicència. L A FundAción isonoMiA de la Universitat Jaume I ha convocado bajo este lema su VII Congreso Estatal, que tendrá lugar los días 14 y 15 de septiembre en Castellón. Resulta fácil entender la oportunidad de este congreso en el contexto actual, en el que la economía ha pasado a acaparar casi por completo la atención mediática, superando con creces a la política.Sin embargo, todavía mucha información sobre la crisis tiende a presentarla como un hecho «natural», sin un origen claramente definido. La crisis no ha tenido padres, no se explica con suficiente exactitud cuál es su origen y quiénes son sus responsables. En realidad, cualificadas opiniones apuntan a que se trata de una crisis sistémica, esto es, una crisis del sistema económico capitalista en su conjunto, producto de su propia forma de organización y de sus mecanismos de funcionamiento, que hoy resultan inadecuados.En los años anteriores al estallido de la crisis se habían ido produciendo unos fenómenos económicos estructurales que crearon el caldo de cultivo que ha permitido que la plaga surgiera y se extendiera: la crisis hipotecaria, el estallido de la inmensa burbuja inmobiliaria, la desregularización financiera y la complicidad de las autoridades económicas y monetarias y, sobre todo, de las agencias de calificación. Todo ello sin que saltaran las alarmas, con la excepción de algunas personas especialistas que ya aventuraban esta catástrofe, pero sin ningún éxito con sus advertencias premonitorias.Otra característica de la información sobre la crisis es que parece afectar a todos por igual y, sin embargo, no repercute de la misma manera sobre toda la población; cabe destacar que tiene un impacto claramente diferenciado según se trate de mujeres y hombres, tal y como muestran los informes más recientes de Naciones Unidas o la Unión Europea.El feminismo académico afirma que el sistema económico y social es patriarcal, se basa en la división clásica público-privado, en la que las mujeres han sido circunscritas al ámbito privado haciéndose cargo de los trabajos no remunerados. Es necesario poner de relieve la necesidad de considerar no solo lo que ocurre en los mercados y en el espacio de trabajo remunerado, sino también el trabajo que no se remunera pero que es fundamental para el mantenimiento de la economía y para el bienestar de las personas.Es cierto que la trayectoria en las últimas décadas ha permitido que las mujeres desarrollen una carrera profesional, a condición de lograr conciliarla en la mayoría de las ocasiones con el trabajo doméstico. El proceso no ha sido paralelo en los hombres, ...