Objetivo: Analizar si el implante más alto en el implante percutáneo de válvula aórtica (TAVI) con válvulas auto-expandibles utilizando la superposición de las cúspides derecha e izquierda disminuye la necesidad de marcapasos definitivo. Material y Métodos: Se analizaron 164 pacientes consecutivos que recibieron TAVI con válvulas auto-expandibles; en 101(61,6%) de ellos se implantaron utilizando la vista coplanar de las tres cúspides, a la cual llamamos técnica convencional (CON) y en 63 (38,4%) utilizamos la técnica COVL, con superposición de las cúspides derecha e izquierda . El punto final primario (PFP) fue la necesidad de marcapasos definitivo (MCPD) a 30 días. Resultado: No hubo diferencias entre los grupos en la edad media, prevalencia de sexo masculino, hipertensión, cirugía de revascularización previa, antecedente de accidente cerebrovascular (ACV), función renal, o hemodiálisis. Los pacientes en el grupo COVL tuvieron más diabetes, angioplastia coronaria (ATC) e infarto previos. La ATC pre-TAVI fue similar, con mayor score STS (6,3 ± 2,1 vs. 5,8 ± 2,4; p = 0,05). La presencia de fibrilación auricular fue mayor en el grupo COVL sin diferencia en bloqueo auriculoventricular, de rama derecha o izquierda. No hubo diferencia en el área valvular aórtica, gradiente medio y fracción de eyección ventricular izquierda. A 30 días se observó una reducción significativa del PFP en la estrategia COVL, (6,3% vs 17,8%, p = 0,03). No hubo diferencia en mortalidad, ACV, sangrado mayor, infarto agudo de miocardio o regurgitación aórtica. Hubo tendencia a menor presencia de nuevo bloqueo competo de rama izquierda en el grupo COVL (4,8% vs. 12,9%, p = 0,08). Conclusiones: El uso de la técnica de COVL, que permite un implante más alto en el TAVI con válvulas autoexpandibles, demostró en esta serie ser factible y seguro, con disminución de la necesidad de MCPD sin aumento de las complicaciones.