“…América latina cuenta con altas tasas de desconexión, al tiempo que no ha sido explotada la potencialidad que Internet y las nuevas tecnologías ofrecen por parte de las naciones, regiones o localidades; por tal motivo se considera que es necesario diseñar ejes estratégicos de desarrollo que incluya una agenda digital con un enfoque global, y que comprometan la acción conjunta de empresas, gobiernos, instituciones educativas, organizaciones civiles y sociedad misma, para que los beneficios de la tecnología permee hacia toda la sociedad, sin anteponer intereses personales o de grupos de poder, y en el que se vea reflejado un verdadero avance en materia de Economía Digital en sus tres componentes: infraestructura de redes de banda ancha, la industria de aplicaciones TIC y los usuarios finales. En México, (12) sugieren que para hacer usufructo de los beneficios de la digitalización es indispensable contar otros factores que van más allá, escogieron tres ejemplos relevantes, un conjunto de agencias reguladoras (IFT, COFECE, PROFECO, CNBV, Banxico, CONDUSEF) independientes coordinadas entre sí, que necesitarán operar a lo largo de la toda la economía para garantizar que la población completa se beneficie de ella, promover la confianza en los sistemas digitales y las transacciones que se realizan a través de ellos y promover la "economía de las aplicaciones" para permitir el desarrollo de herramientas digitales que satisfagan las necesidades locales.…”