e considera violencia en las relaciones de noviazgo de los adolescentes y jóvenes (VRN) a cualquier tipo de agresión intencionada de un miembro de la pareja contra el otro durante el noviazgo. Las agresiones en el noviazgo suelen encuadrarse en tres grandes categorías (i.e., violencia física, psicológica y sexual) y, tal y como se puede ver en la Figura 1, se manifiestan de diferentes formas (Cornelius y Resseguie, 2007;Foshee, 1996;Foshee, Bauman, Linder, Rice y Wilcher, 2007;Leen et al., 2013;Shorey, Cornelius y Bell, 2008). Así y todo, la diferenciación entre las diversas formas de violencia es útil para facilitar su estudio, pero hay que tener presente que los diferentes tipos de agresión están interrelacionados y muy frecuentemente, tienen lugar de manera conjunta (Pozueco, Moreno, Blázquez y García-Baamonde, 2013;Stets y Henderson, 1991).Desde que James Makepeace (1981) ya alertara sobre la necesidad de prestar atención a la violencia que se producía durante el noviazgo, se ha ido generando un importante corpus de investigación empírica sobre diversos aspectos en esta materia (e.g., modelos teóricos, prevalencia, factores de riesgo asociados o programas de intervención). La gravedad de este fenómeno violento y su impacto en la sociedad actual, hacen necesaria la identificación de su prevalencia real y de los factores de riesgo asociados más relevantes. De esta forma, se podría incrementar la eficacia de los programas preventivos de la violencia contra la pareja implementados específicamente en los entornos educativos, ya que con frecuencia las primeras relaciones de noviazgo entre los adolescentes se inician en los centros de educación secundaria.En los últimos años se han realizado algunas revisiones sistemáticas sobre prevalencia de la violencia contra