En las últimas dos décadas se ha focalizado en la escuela, el interés sobre la argumentación como herramienta importante para el desarrollo del pensamiento crítico. Actualmente, se pueden encontrar diferentes modelos de argumentación propuestos por diversos autores. A pesar de ser bastantes, lo cierto es que no parece haber un norte claro que permita orientar y seleccionar los modelos según su necesidad o conveniencia a la hora de aplicarlos en el aula. Por ello, en el presente artículo se exponen los resultados de una investigación analítica comparativa de cada uno de los principales modelos argumentativos y sus precursores: Aristóteles (1982, 1988), Gótama (1913; la escuela nyāya o lógica india), Sócrates (Platón, 2010, Crát.), Sexto Empírico (1996), los filósofos vitandines (argumentación negativa india), la escuela de los lógicos (shi), la escuela china de los nombres, Toulmin (2007), De Zubiría (2001) y De Zubiría (2006), Díaz (2014), Adam (1992), Van Dijk (1996a, 1996b), Van Eemeren (2019), Van Eemeren y Grootendorst (2002), Perelman (2007) y Perelman y Olbrechts-Tyteca (1989). Dicho análisis permitió clasificar todos estos modelos en cuatro tipos (formal, conceptual, persuasivo y pragmadialéctico) a partir de sus elementos y estructura. Una vez realizado este análisis, se evalúa la aplicabilidad de cada uno de ellos en los procesos de enseñanza a la luz de los siguientes criterios: aportes a la construcción del conocimiento; habilidades comunicativas intervinientes; procesos de pensamiento favorecidos; actitudes, valores y emociones que permite desarrollar; limitaciones de cada modelo; y tipo de población para los que son más pertinentes. En síntesis, se pretende ofrecer herramientas que faciliten a maestros e investigadores reconocer los principales modelos argumentativos existentes, sus características, posibles bondades y los alcances de su puesta en práctica en el salón de clase.