“…En este trabajo intentamos hacer dialogar la noción de segregación y la distribución de equipamientos e infraestructura con las prácticas de movilidad. Partimos de entender que la localización en la estructura urbana, que presenta elementos de segregación, moldea las prácticas de movilidad cotidiana a partir de habilitar o restringir determinado uso de la ciudad y sus beneficios (Apaolaza y Blanco, 2015;Brikman, 2019;Cosacov, 2015;Hernández, 2012;Katzman, 1999). Nos concentramos específicamente en las prácticas de movilidad cotidiana entendidas tanto como prácticas sociales -estrategias implementadas por los/as sujetos/as, guiados/ as por ciertos intereses, que dialogan con capitales disponibles-así como prácticas espaciales, que no pueden ser pensadas por fuera del espacio (Di Virgilio, 2007;Jirón y Zunino Singh, 2017;Landon, 2013;Segura, 2010).…”