El empiema pleural es es una entidad clínica frecuente en la edad pediátrica y consiste en el acúmulo de fluido purulento en la cavidad pleural como respuesta a un proceso infeccioso. Se presenta aproximadamente en un 10% de los pacientes con infecciones respiratorias. Es más común en niños menores de 5 años, inmunodeprimidos, con parálisis cerebral infantil, cardiopatías congénitas, enfermedades pulmonares crónicas como la fibrosis quística, así como en pacientes con neumonías bacterianas, virales o micóticas.El cuadro clínico se caracteriza por malestar, fatiga, anorexia, dificultad respiratoria que se manifiesta con polipnea, tirajes intercostales y subclaviculares, tos, dolor torácico y fiebre.Entre las opciones terapéuticas actuales para esta enfermedad está el tratamiento médico de sostén, que incluye ingreso hospitalario, hidratación, oxígeno suplementario de acuerdo con la necesidad, medidas de apoyo vital y antibióticos de amplio espectro. La cirugía como tratamiento resolutivo tiene sus indicaciones, la cual debe ser aplicada oportunamente para evitar complicaciones.El pronóstico de esta afección es todavía reservado y la evolución será mejor si el diagnóstico y tratamiento se realiza precozmente. Aun así, hoy en día el pronóstico es más favorable gracias a la creación, ampliación y equipamiento de las unidades de