La resiliencia, entendida como la capacidad de un sistema para absorber impactos, se erige como una preocupación central en las áreas metropolitanas: instituciones nacionales y supranacionales desarrollan planes tendientes a tratarla a partir de la reducción de la vulnerabilidad. Por ello, este artículo focaliza en los cuatro aglomerados urbanos argentinos que superan el millón de habitantes: Gran Buenos Aires-Gran La Plata (AGBA-GLP), Gran Córdoba (AGC), Gran Rosario (AGR) y Gran Mendoza (AGM); el objetivo es diseñar una alternativa del índice de Vulnerabilidad Social ante el Desastre (IVSD) para calcularlo desde el primer trimestre de 2020 hasta el tercero del 2022 y así aproximarse a su resiliencia. Metodológicamente se acudió a los microdatos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC). Ante las tres dimensiones que componen al índice (social, habitacional y económica), la habitacional es la que presenta mayor heterogeneidad entre los cuatro espacios siendo que el acceso a agua de red y a servicio cloacal destacan al respecto. Finalmente, tras postular la hipótesis que la magnitud demográfica está asociada positivamente con el IVSD, no se encuentra correlación pero el resultado cambia drásticamente tras eliminar al AGBA-GLP (el de mayor tamaño) del cálculo.