“…La revisión de literatura conduce a afirmar que, pese a casi 500 años colonialismo político y académico (1531-2031), en el que tanto el colonizador como el colonizado son responsables, el uno por encubrir y el otro por imitar la cultura occidental, la yupana se mantiene vigente como riqueza etnocientífica adaptándose a los avances de la tecnología y empoderándose de los procesos de aprendizaje de la matemática. A la luz de las corrientes hermenéuticas, la interculturalidad, la justicia social y la etnomatemática (Vilca et al, 2020), ha cobrado notoriedad, coadyuvando no solo al desarrollo de la educación matemática sino al proyecto decolonial que busca desenmascarar los discursos hegemónicos (Tun y Díaz, 2015). Las investigaciones efectuadas sobre la yupana, en los diversos países, son un tributo a esta tecnología ancestral, que son aún insuficientes, por lo que queda el reto de divulgar sus bondades.…”