“…A partir de la crítica de la idea de "integración" curricular que durante las últimas cuatro décadas ha sustentado las normativas oficiales de enseñanza de las Ciencias Sociales expedidas en Colombia, algunos investigadores han sostenido que la Historia fue invizibilizada y diluida como saber escolar en este país, dejando de ser, por lo tanto, enseñada en la básica primaria y secundaria (Acevedo & Samacá, 2012;Guerrero, 2011;Vargas, Acosta & Sánchez, 2013). Sin embargo, este tipo de postulados han comenzado a ser rebatidos a través de evidencia empírica que demostraría la influencia que aún mantiene la Historia en: las evocaciones en torno a las clases de Ciencias Sociales de los estudiantes recién graduados del bachillerato (Arias, 2015(Arias, , 2017; la estructura y tipo de contenidos de los textos escolares de esta área (Ibagón, 2019;Padilla & Bermúdez, 2016); la marcada presencia de contenidos históricos organizados cronológicamente en los planes de estudio de futuros profesores de Ciencias Sociales, (Aguilera, 2017;Ibagón, 2016;Rodríguez, 2013); las representaciones sociales de estos últimos en torno a su enseñanza (González, Santisteban & Pagès, 2020), y; los proyectos de intervención educativa que adelantan algunos profesores en ejercicio (Gómez, 2015).…”