“…La presencia de NMCG, a pesar de su carácter benigno, representa un factor de riesgo importante para el desarrollo de melanoma, principalmente en las primeras dos décadas de la vida, con un riesgo relativo de malignización de 52-1,000 veces mayor que el de la población general, y una edad media de presentación a los 14 años. El tamaño (≥ 20 cm), la presencia de nevos satélite, la hipertricosis, el aspecto nodular, la rugosidad o el color heterogéneo son características que por sí mismas aumentan el riesgo de malignidad, que se exacerba al existir antecedentes familiares de melanoma, exposición prolongada a la luz ultravioleta o inmunosupresión 8,13,23,24 .…”