Las religiosas de la Congregación de Nuestra Señora de la Caridad del Buen Pastor desempeñaron labores vinculadas a alojar y recluir en asilos a una población femenina de franja etaria heterogénea. Sus establecimientos adoptaron el nombre de “cárcel de mujeres” en muchas localidades de la Argentina.En este artículo se realiza un estudio de caso acerca del proceso de instalación de un asilo de esta congregación en Azul, entre 1918 y 1932. La indagación del período mencionado, que se inicia con la idea de incorporar a las religiosas a esta ciudad y finaliza con la inauguración del Asilo Buen Pastor, permite entrever las relaciones entre sociedad, asistencia, Estado y religión en esa localidad. Asimismo, se exploran las particularidades y avatares políticos, económicos y sociales que generaron la mutación de sus labores tradicionales.Para realizar este artículo se utilizaron como fuente principal diarios locales, complementándolos con actas de la Defensoría de Menores y expedientes judiciales. Su objetivo es, a partir de un caso no estudiado, aportar nuevos acercamientos a las labores desempeñadas por la Congregación del Buen Pastor en Argentina en relación con la población femenina encerrada.