“…Es importante que, ante un paciente en edad pediátrica que consulta por nódulos dolorosos acrales, sepamos reconocer este cuadro, y lo diferenciemos de otros con clínica similar (tabla 1). Los principales diagnósticos diferenciales a tener en cuenta son: la urticaria traumática plantar, caracterizada por brotes recidivantes de maculopápulas eritematosas plantares, pruriginosas o dolorosas, que aparecen horas después de una actividad física intensa, en cuyo estudio histológico aparece un infiltrado inflamatorio en dermis sin afectación de las glándulas sudoríparas ecrinas 2,8,9 ; el eritema nodoso plantar infantil, que cursa con nódulos muy dolorosos, generalmente precedidos de infección o consumo de fármacos, que se resuelven de forma más lenta dejando una hiperpigmentación postinflamatoria y en cuya histología encontramos la característica paniculitis septal propia del eritema nodoso 2,8,10 ; y el síndrome de pie caliente por pseudomonas, debido a una infección bacteriana por Pseudomonas aeruginosa que presenta una clínica muy similar a la HPPI, con nódulos plantares eritematosos, dolorosos, de aparición brusca, pero que se manifiesta característicamente en forma de brotes comunitarios en niños, a partir de 6 a 48 horas después de haberse bañado en una piscina caliente o temperada contaminada por dicho patógeno 11 . También podrían considerarse en el diagnóstico diferencial otras entidades como el eritema multiforme, la perniosis y algunos cuadros de vasculitis y celulitis 2,8 .…”