Los hidrocarburos policíclicos aromáticos (PAHs) son contaminantes ambientales que llegan al ambiente vía combustión incompleta de crudo de petróleo y derrames accidentales de productos petroquímicos. A nivel ambiental, los PAHs son tóxicos comúnmente encontrados en suelos y sedimentos de zonas industriales, son electroquímicamente estables y pueden ser extremadamente tóxicos, poniendo en riesgo la salud humana y ecológica. Una técnica habitual para remediar zonas contaminadas consiste en la utilización de plantas, estrategia conocida como fitorremediación, que se basa en la acción combinada de las plantas y sus comunidades microbianas asociadas para degradar compuestos tóxicos ubicados en suelos. A fin de evaluar el potencial de la fitorremediación como una estrategia para reducir el impacto del fenantreno en el suelo y el rol de los exudados en el proceso, se analizó en un sistema de diferentes microcosmos la estructura y dinámica de las comunidades microbianas que intervienen en el proceso de rizodegradación y se cuantificó el fenantreno residual, la actividad deshidrogenasa y el número de hongos y bacterias. El capítulo 2 se centró en analizar comparativamente la cinética de la degradación del fenantreno en un suelo artificialmente contaminado e implantado con plántulas de M. sativa así como también evaluar la actividad degradadora de los microorganismos asociados. En el capítulo 3 se caracterizaron las comunidades microbianas de un suelo artificialmente contaminado con fenantreno e implantado con M. sativa y sus variaciones a lo largo del proceso. Por último, en el capítulo 4 se analizó el efecto de extracto de raíces de M. sativa sobre la remoción de fenantreno en un suelo artificialmente contaminado y sobre la comunidad microbiana asociada. Se observó que el tratamiento de fitorremediación estuvo asociado a una mayor riqueza y diversidad bacteriana. Aunque una sucesión de OTUs (Operational Taxonomic Unit) en el tiempo se detectó en los tratamientos, se demostró que las variables riqueza y diversidad están condicionadas por la concentración de fenantreno, que a la vez, según el tratamiento, poseen diferentes comunidades bacterianas. Según lo expuesto, a lo largo del proceso de fitorremediación existen cambios predecibles en la estructura de la comunidad bacteriana que pueden ser de utilidad para mejorar las técnicas de remediación de suelos contaminados con PAHs. En este estudio, la fitorremediación proporcionó una significativa reducción en el contenido de fenantreno en el suelo después de 56 días, con un 0,45 % residual comparado al tratamiento control (4,25 %).