“…En el Pacífico costarricense, los ambientes marinos más estudiados han sido principalmente los arrecifes rocosos, los arrecifes y comunidades coralinas, las zonas rocosas intermareales, las playas y los manglares (Cortés, 2016). En Costa Rica, los estudios de diversidad se han concentrado en los ambientes más someros, desde las zonas intermareales hasta los 10 m de profundidad, posiblemente relacionado con las facilidades en el muestreo y con especies de importancia comercial, y por lo tanto son sitios que han tenido mejores medidas de conservación en el país (Alvarado, Beita-Jimenez, Mena, Fernández-García, Cortés, Sánchez-Noguera, Jimenez & Guzmán-Mora, 2018;Alvarado, Beita, Mena, Fernández-García, & Guzman-Mora, 2015;Alvarado, Beita, Mena, Fernández-García, Guzman-Mora & Cortés, 2016;Alvarado, Herrera, Corrales, Asch, & Paaby, 2011;Alvarado, Sánchez-Noguera, Arias-Godínez, Araya, Fernández-García & Guzmán, 2020;Samper-Villareal, Bourg, Sibaja-Cordero, & Cortés, 2014;Sibaja-Cordero & Cortés, 2009;Sibaja-Cordero & Vargas-Zamora, 2006). También se han realizado investigaciones en ambientes que van de los 10 a los 40 m utilizando buceo autónomo, no obstante, están más relacionados con estudios taxonómicos en grupos como los octocorales (Breedy & Guzmán, 2003).…”