La actividad de la investigación científica se ha convertido en el pilar del avance de la sociedad, sin embargo, solo unos cuantos se dedican a ella debido a que no todos desarrollamos las competencias investigativas en la universidad, ya que la mayoría pasa una variedad de vicisitudes para solo conseguir aprobar o realizar su proyecto e informe para obtener su título universitario. Por otra parte, muy pocos llegan a la entelequia de la investigación científica así tenemos a Aristóteles y Galileo en siglos atrás y ahora se busca que las nuevas generaciones no sean apáticas con la disciplina de la investigación científica, pues ella es la que nos brinda la calidad de vida a la que estamos acostumbrados en el siglo XXI. Asimismo, el quehacer de la investigación debería iniciarse desde los primeros años de estudio del niño para que forjen el espíritu de la curiosidad investigativa, el cual se potencializará en la etapa universitaria, pero hasta que no se de este escenario, continuarán las vicisitudes en su aprendizaje. Este artículo se orienta a determinar porque los estudiantes universitarios pasan por una variedad de vicisitudes para llegar a desarrollar una entelequia investigativa.