Resumen El espacio público -EP- urbano es fundamental para las ciudades sostenibles, resilientes, habitables. Su relevancia es reconocida por políticos, instituciones y academia. No obstante, su materialización no es la proyectada, más si se trata de ciudades andinas en relieves montañosos como Manizales y Medellín en Colombia. Este trabajo exploró las directrices sobre EP en las normas nacionales y locales establecidas en los planes de ordenamiento territorial -POT- de los municipios, de los cuales hay dos versiones, dos momentos. Así mismo, evaluó los EP al inicio de cada POT para determinar cuánto nuevo EP se logró generar y en qué partes de la ciudad, como un indicio para analizar la equidad en su distribución. Se encontraron cambios importantes entre las dos generaciones de POT en ambas ciudades en cuanto a los discursos, y concepciones del EP, intenciones declaradas de equidad, concentración de EP en algunas zonas urbanas y carencia en otras. Las ciudades siguen lejos de lograr las metas planteadas en los indicadores cuantitativos y, además, están perdiendo EP por ocupación de privados. Los retos son cada vez mayores, pero además de lo cuantitativo, es necesario considerar características de calidad, accesibilidad y conectividad que dan vitalidad a estos espacios.